domingo, 20 de enero de 2013

Mi niñería descosida y mis ganas de amar sin medida por encima de cualquier riesgo y peligro.. Me hizo daño, todos los caprichos.. Ahora en el aire, y esa mirada perturbadora que a veces en noches de desvelo me alteran la conciencia.. Son lo que me ha hecho realmente darme cuenta de.. Quien era antes, y quien soy ahora. En la adolescencia se hacen locuras sin asumir responsabilidades ni pensar en las consecuencias, en la vida se cometen errores.. Irónico que es.. Que al morir todo se borra.. Porque no podrás volver a vivir la misma oportunidad, estás muerto, ¿recuerdas?.. 

Después de todo, el amor, el jodido amor, que tanto sufrir me ha hecho, me ha dado una segunda oportunidad, con una persona que una tarde de Agosto.. Triste, la ví, esa persona que me hizo la noche de esa tarde maravillosa solo por el hecho de haber conocido esa mirada, pero solo eso. 
Un tiempo después.. La vida me brindó un deseo por cada error.. Y volvimos a "tropezar" inesperadamente.. Desde ese momento.. No hemos dejado de vernos.. Y de escuchar esa voz que envelesa mis sentidos, volviéndolos bulnerables al compás de sus manos al tocarme, ojalá la eternidad me haga pasarla con la tuya y tu sonrisa.


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