sábado, 16 de febrero de 2013

Recuerda que tu elegiste ser.. El que me guiase.. Pensar que a cada paso que dés yo lo daré contigo, me alegra tanto.. Los días.
Ayer fue una noche de esas.. De esas geniales que no se olvidan con facilidad.. 
Me hiciste sentir tan importante, tan implicada en tí, en tu vida.. Me sentí tan cerca de ti y tan lejos de lo que duele y escuece. 
Éramos nosotros y el mundo, era una noche preciosa. No hacía frío, ni calor, temperatura perfecta para soportar nuestro calor.. 
Hay armonía en los besos contados, paz al mirarnos, ganas de todo menos de volver a casa. 
Estar el uno con el otro y acariciarnos hasta quedarnos dormidos en ese coche.. En nuestro lugar. En esa carretera abandonada donde tu y yo llegamos a la madrugada.. 
Pasamos tardes, noches, días.. En ese lugar.. Rodeado  de flores secas y ramas deslizadas en el suelo por el viento..

Ahora la vida me sonríe picarescamente, ya que soy consciente de que pocas cosas duran eternamente.. 
Por no decir nada.
Yo pensaba así, pero ese guiño, esa sonrisa.. Me ha cambiado por completo la forma de sobrellevar el dolor, me hace ver un futuro contigo, del que nadie tiene certeza de ello.. Pero a pesar de eso.. ¿Sabes? Quiero intentarlo, una y mil veces.. Porque merece la pena este estado de éxtasis de la que me siento esclava, porque la felicidad me hace presa de estar al lado tuya.



2 comentarios:

  1. Oye, ¡tú!
    Te ha quedado preciosa la entrada. Lo haces genial y derrocha sentimiento por los cuatro costados. ME ENCANTA ^^
    Un pequeño beso de ornitorrinco salvaje.

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  2. Jaja muchas gracias pequeño ornitorrinco :):) me alegra que me leas^^

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