miércoles, 23 de mayo de 2012

¡Qué bonita eres luna!, tu que escoges estrellas para que el cielo se asemeje al día, con sus reflejos solía alumbrar mis papeles hinundados de lágrimas y confesiones de pasiones e ilusiones.
Amante de un amor imposible. 
Nunca tuve a nadie pero siempre me alumbra aún cuando tengo frío, me ilusiona y me llena de luz en noches donde me invade el helastío.

Hoy te extraño, tu peculiar forma de mirar, tus latidos al palpitar.. 
Luna, haz que vuelva una noche, a la caída del atardecer, cuando estrellas se difuminan creando luces guardadas del día.

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